CONTENIDOS

534,553 

TEMAS MÁS BUSCADOS

FOTOTECA NACIONAL

PUBLICACIONES

PATRIMONIO MUNDIAL

ACERVOS Y FONDOS

  • Colección de Libros de Coro - Museo Nacional de Virreinato

    Cantorales

    93 volúmenes forman la colección de libros de coro del Museo Nacional del Virreinato, los cuales proceden de la Iglesia Catedral Metropolitana y otros centros religiosos de Nueva España. Los libros de coro fueron creados como instrumentos para propiciar la alabanza y la adoración. Estos responden a las festividades del calendario litúrgico como la Natividad, la Pascua, etc. Por lo tanto, se les transformaba de acuerdo con las necesidades de las autoridades eclesiásticas.

    Su llegada a la Nueva España se sitúa en el siglo XVI, donde adquirieron también una función catequística. El material que los compone es pergamino, las notas y los textos en latín se encuentran en tinta de color negro, mientras que el rojo se utilizó para rúbricas, epígrafes, abreviaturas y los asteriscos que indicaban la respiración a los cantores. Además de lo anterior, los libros de coro contenían decorados e iluminaciones. Cabe mencionar que el tamaño de los textos debía ser lo suficientemente grande para ser visibles por todos los miembros del coro.

    VER MÁS
  • Colección Felipe Teixidor - Fototeca Nacional

    Fotografías

    En enero de 1979 ingresó a la Fototeca Nacional el acervo de este destacado intelectual de origen español. Adquirido por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (inah). Por desgracia, también en este caso operaron los criterios de accesibilidad a los materiales, por lo que se modificó sustancialmente el orden original, incorporándose imágenes de otros fondos, especialmente del llamado Culhuacán, a la vez que piezas de este acervo fueron trasladadas a otras colecciones. En los últimos tiempos se ha trabajado para recuperar su integridad y actualmente cuenta con 13,532 piezas (410 negativos y 13,122 positivos) que abarcan de mediados del siglo XIX a cerca de 1970. El extenso legado de Teixidor se complementa con los materiales comprados por el Archivo General de la Nación, y por su acervo bibliográfico, adquirido en 1987 por la Biblioteca de México.

    Felipe Teixidor (1895-1980) nació en Barcelona, y se naturalizó mexicano en 1928. Estudió en su ciudad natal y muy joven se fue a vivir a París, donde estuvo en contacto con el medio artístico. Llegó a Orizaba, Veracruz, en 1919, y en 1922 se estableció en la capital, donde rápidamente se incorporó al ambiente cultural de vanguardia de la época, sobresaliendo su amistad con Edward Weston y Tina Modotti, la cual marcaría su apreciación hacia la fotografía, misma que también practicó. Frecuentó a diego Rivera, Jena Charlot, al Dr. Atl, Nahui Olin, Enrique y Gabriel Fernández Ledesma, Monserrat Alfau –Monna, quien se convertiría en su esposa-, Rafael Sala, Salvador Novo, Xavier Villaurrutia, Genaro Estrada y muchos otros.

    En México desarrolló sus intereses bibliográficos y cultivó su afán coleccionista. Fue vendedor de libros viejos, lo que seguramente le puso en contacto con fotografías antiguas –apreciadas por algunos miembros de sus círculo, como Enrique Fernández Ledesma-, y que debió empezar a coleccionar desde época muy temprana. Desempeñó múltiples puestos en la administración pública y coordinó las cuatro primeras ediciones del Diccionario Porrúa de historia, geografía y biografía de México y la colección Sepan Cuántos… de la misma casa editorial. La labor de edición la compartió con Monna, también española e intelectual por derecho propio. En 1980 ingresó a la Academia Mexicana de la Lengua.

    La colección de Felipe Teixidor destaca por su amplia variedad, que responde a su curiosidad en materia fotográfica y al uso que dio a las imágenes para documentar e ilustrar publicaciones. Con enorme sensibilidad plástica, Teixidor escogió obras de gran calidad, con técnicas y formatos tan diversos, que su legado resulta un valioso muestrario de los principales fotógrafos que trabajaron en México y de los distintos procesos fotográficos. Entre los autores extranjeros se encuentran Désiré Charnay, Julio Michaud, François Aubert, Alfred Briquet, William Henry Jackson, Gove and North y Hugo Brehme. En cuanto a los nacionales, cabe mencionar a Octaviano de la Mora, Lorenzo Becerril, Cruces y Campa, y los hermanos Valleto.

    Las imágenes con vistas de las principales ciudades mexicanas, así como sus paisajes y monumentos históricos y arqueológicos, han servido para el estudio del patrimonio mueble e inmueble. Su colección de retratos del siglo xx es una de las más ricas, tanto por la cantidad como por la amplia gama de personajes famosos y anónimos que aparecen, convirtiéndola en referencia básica para el estudio de las maneras de representación individual y colectiva de las clases media y alta del México decimonónico. Las series de tipos mexicanos y escenas costumbristas abren el espectro a una gama más amplia de nuestra sociedad. No faltan en su colección fotografías y postales de la Revolución, sobre todo de la Decena Trágica y la invasión norteamericana de 1914, además de vistas de ciudades y monumentos europeos y americanos. Finalmente, Teixidor también nos dejó un registro de sus viajes de trabajo, que le llevaron a recorrer gran parte del territorio nacional.

    VER MÁS
  • Colección Carlos Jurado - Fototeca Nacional

    Fotografías

    En 1984, el pintor y fotógrafo chiapaneco Carlos Jurado (1927) participó en la creación del Museo de la Fotografía en Pachuca, Hidalgo. Con este motivo impartió un taller y realizó tomas que pasaron a formar parte del acervo, junto con otros materiales que generosamente donó. Se trata de 191 piezas (184 negativos y 7 positivos) realizadas entre 1974 y 1984. La colección se incrementó posteriormente en los años 2006 y 2012 con la entrega de 290 negativos del autor tomados con sus múltiples cámaras estenopéicas. Se trata de tomas efectuadas en el interior de su casa en Ciudad de México, de viajes por Francia, Islandia y Nueva  Zelanda. Con formación en artes plásticas, Jurado fue miembro del Taller de Gráfica Popular (TGP), y ha desarrollado una importancia labor pictórica. También ha promovido la utilización de la fotografía estenopeica y los procesos antiguos, aunado al uso de materiales modernos, donde combina su formación pictórica y su interés por la investigación técnica.

    VER MÁS
  • Colección Estados de la República - Fototeca Nacional

    Fotografías

    En la década de 1980 fue integrada esta colección con 1,131 positivos provenientes de diversos acervos, que abarcan de 1920 a 1980. Contiene un registro de Querétaro de fines del siglo pasado y una colección de arte, monumentos y artesanías de Zacatecas, aparentemente donados por el Fondo Nacional para Actividades Sociales (fonapas) de ese estado con motivo de una exposición organizada en Hidalgo en la misma época. También resguarda la reprografía de una serie de panorámicas de Guanajuato que datan de 1920 a 1940, las cuales desafortunadamente no fueron copiadas con calidad.

    VER MÁS
  • Colección de Libros de Coro - Museo Nacional de Historia, “Castillo de Chapultepec”
    La colección de los libros de coro del Museo Nacional de Historia “Castillo de Chapultepec” está conformada por 9 volúmenes que contienen los cantos litúrgicos de la Iglesia Católica que se entonaban durante los oficios religiosos en las catedrales, las iglesias y las capillas conventuales. Dichos cantos responden a las festividades del calendario litúrgico como la Natividad, la Pascua, entre otros. Los libros de coro de esta colección son de gran formato debido a que respondían a la necesidad de ser leídos por grupos numerosos de cantores a distancia, por lo que ls iluminaciones (en caso de tenerlas) y los textos en latín, también debían ser lo suficientemente grandes. Los libros de coro están construidos por una gran variedad de materiales, generalmente el cuerpo del libro es de pergamino, las tapas son de madera, el material de recubrimiento es de piel y como protección de esta última, se utilizaban chapetones metálicos.
    VER MÁS
  • Colección Eduardo Oropeza - Fototeca Nacional

    Fotografías

    Esta colección fue constituida con 155 piezas (5 negativos y 150 positivos) que se encontraban en poder del antropólogo Eduardo Oropeza, e ingresaron a la Fototeca Nacional en 1997. Aparentemente, las imágenes –tomadas durante el primer decenio del siglo XX- son obra de un fotógrafo aficionado que captó con cámara estereoscópica escenas de días de campo, jaripeos y vistas de una casa campirana con sus jardines, así como retratos de familias campesinas. También contiene series rotuladas –quizá obra comercial- sobre Chapultepec e Iglesias de la Ciudad de México, además de vistas, puentes y estaciones de ferrocarril, especialmente de la zona aledaña a Xalapa, Veracruz.

    VER MÁS
  • Colección Expedición Cempoala - Fototeca Nacional

    Fotografías

    Conocida como Colección Teoberto Maler, sabemos hoy que este conjunto de imágenes procede de la expedición a Cempoala que, entre agosto de 1890 y abril de 1891, dirigió Francisco del Paso y Troncoso –entonces director del Museo Nacional-, para obtener materiales que serían enviados a Madrid por motivo de las celebraciones del Cuarto Centenario del Descubrimiento de América. El autor, galardonado con medalla de plata en esa ocasión, fue Rafael García, posiblemente adscrito a la Secretaría de Guerra, aunque debió ser fundamental la visión de Del Paso y Troncoso, conocido aficionado a la fotografía.

    La incorrecta adjudicación a Maler se originó en la extraordinaria calidad del registro realizado por García, también característico del fotógrafo alemán, de quien, por otro lado, se conservan imágenes en otros fondos.

    Cempoala o Zempoala, en Veracruz, es considerada la segunda ciudad prehispánica más importante del estado después de El Tajín, sitio que también fue visitado por los expedicionarios, en 1519, cuando Hernán Cortés y sus tropas llegaron al reino de Cempoala quedaron deslumbrados por la magnificencia de sus edificios, cuyos estucos, decorados con pintura a base de conchas marinas, les hicieron pensar que las pirámides estaban hechas de plata y que se trataba de la mítica ciudad de El Dorado. Cempoala jugó un papel determinante para la caída del imperio mexica, ya que allí indígenas totonacos, que estaban sometidos al yugo de Tenochtitlán, se integraron al ejército de Cortés. Las consecuencias de la Conquista y la epidemia de viruela marcaron su decadencia, y la ciudad fue abandonada en el mismo siglo XVI. El valor del sitio encajaba perfectamente con las vertientes que se privilegiaron en la Exposición de 1892: la muestra de las antigüedades prehispánicas y de la Conquista, vista esta última como fundamento de la moderna nación mexicana.

    Sin duda, la colección proviene del Museo Nacional, y resguarda 807 piezas: 124 negativos originales y 683 positivos, algunos de los cuales son impresiones de época; se trata de un rico espectro de los usos potenciales de las imágenes científicas que abarca de 1890 a 1911. Algunas de las impresiones fueron presentadas en Madrid y otras exhibidas en el Museo, mientras que los negativos se emplearon para ilustrar el ensayo de Jesús Galindo y Villa, “Arqueología mexicana”. Las ruinas de Cempoala y del tempo del Tajín, exploradas por el director del Museo Nacional de Arqueología, Historia y Etnología, en misión en Europa. D. Francisco del Paso y Troncoso”, publicado en los Anales del Museo Nacional, en 1911.

    Es posible establecer una tipología del conjunto de tomas ejecutadas por Rafael García: panorámicas del paisaje, en las que destacan los ríos y poblaciones que visitó la expedición, tomadas con el fin de contextualizar el recorrido; retratos de grupo de los exploradores en las diferentes etapas del trayecto, en ocasiones con sus anfitriones o con autoridades locales; vistas de conjuntos arqueológicos, complementadas con algunos de sus rasgos constructivos u ornamentales; tomas de excavaciones en las que posan trabajadores, expedicionarios y, a veces, algún visitante; detalles de piezas arqueológicas en las ruinas o en las poblaciones a las que fueron trasladas; y, por último, retratos de la población totonaca.

    VER MÁS
  • Acervo Histórico - Museo de las Culturas de Oaxaca

    Piezas históricas

    El acervo de la colección histórica muestra objetos propios de la consolidación de la colonia y la evangelización en la región de Oaxaca. Destacan aquellos que revelan las formas en las que las poblaciones indígenas respondieron a estos fenómenos, mostrando una tenaz resistencia para reponerse de los estragos y traumas de la Conquista. Como consecuencia de esta oposición se consiguió el fortalecimiento de su identidad, la reactivación de su economía, la recuperación de su dinámica demográfica y una organización basada en tradiciones, usos y costumbres. De igual forma, se manifiestan distintos momentos históricos del Oaxaca independiente hasta la revolución y durante el siglo XX.

    VER MÁS
  • Serie Bitácora del arqueólogo - INAH TV

    Documentales

    A lo largo de los 13 capítulos documentales de esta serie, escucharemos, de viva voz, a los especialistas de las zonas arqueológicas narrarnos la historia, usos y costumbres de las antiguas culturas. Las pinturas rupestres en Baja California y las zonas de Calakmul, Cantona, Chichén Itzá, Dzibilchaltún, Monte Albán, Palenque, Paquimé, Teotihuacan, Xochicalco, Xochitécatl, la zona de Filobobos y el sur de Quintana Roo, son los espacios protagonistas de esta serie.

    VER MÁS
VER TODOS
 

AVISO LEGAL

Mediateca INAH es el repositorio digital de acceso abierto del Instituto Nacional de Antropología e Historia de México a través del cual pone a disposición del público el patrimonio cultural e histórico a su cargo.

Todos los contenidos de este portal pertenecen al Instituto Nacional de Antropología e Historia de México. La información y los archivos aquí disponibles pueden ser utilizados de manera personal y sin fines de lucro, siempre que no sean alterados, se reconozcan todos los créditos correspondientes y se indique la referencia a este repositorio. Para cualquier otro uso se deben seguir las instrucciones de la sección Preguntas frecuentes .

La integración, estandarización y revisión de los contenidos de este repositorio digital son actividades continuas por lo que los datos pueden cambiar parcial o totalmente en cualquier momento.